
Es difícil entablar los universos
en que se establecen este tipo de shows de una manera en que la audiencia se lo
tome en serio. Recuerdo el piloto de Agent’s of S.H.I.E.L.D., por ejemplo, y mi
propia decepción al sentir que no podía tomarme en serio a la mayoría de
personajes. Tal vez haya sido solo yo, y dicho show terminó de ganarse mi amor
por completo al final de la temporada, pero le tomó sus buenos 10 o 12
capítulos encontrar la manera. Con Gotham veo un inicio bastante más estable,
un cast excelente, y personajes que desde ahora lograron ganarse mi afecto.
La historia empieza donde todos
sabíamos que empezaría, con los Wayne siendo asesinados por razones
desconocidas, pero aparentando ser un asalto particularmente violento. Por más
de que la escena de alguien cayendo de rodillas y gritando “Nooooo!!!” sea
terriblemente cliché, hay que mencionar que David Mazouz la hizo
particularmente bien.

Pero me estoy adelantando. El
capítulo hizo un gran trabajo en presentar a sus personajes sin hacer que se
sienta todo demasiado informativo, y algunos de ellos son joyas que merecen ser
mencionadas.
Considerando que Gotham es una
ciudad ahogada en crimen, no es de sorprender que sus individuos más
interesantes sean del bando de los malos. Me cuesta mucho decidir quién me
gustó más, si Fish Mooney o el soon-to-be Pingüino, pero ambos lograron
personajes intrigantes y anecdóticos, cada uno a su manera.
A Jada Pinkett Smith evidentemente le
viene perfecto el papel de madame de la mafia, balanceando de manera brillante
inteligencia, sensualidad y brutalidad. Fish Mooney no es una persona con la
que te quieres meter, lo cual intuitivamente sabíamos incluso antes de que el
Pingüino fuera descubierto en su traición. Simplemente tiene ese aire de poder
que te hace dar un paso atrás si eres prudente, lo cual resulta más brillante
todavía cuando permites que el personaje tenga un atisbo de vulnerabilidad. Por
esto, mi escena favorita fue lejos cuando Fish descubre al Pingüino, su
reacción hacia él y sus gritos a causa de su traición. Porque la escena se
volvió tanto más poderosa cuando descubres que Fish efectivamente tiene
lágrimas en los ojos mientras lo golpea, y le crees cuando demuestra,
en su manera oscura y retorcida, que le importan sus “secuaces”.
El Pingüino, por otro lado,
resultó el naive de la situación, pensando que siendo un novato podía derrocar
a la reina y no tener consecuencias. Nada más lejos de la realidad, no solo
porque Fish está todavía a leguas de distancia de él, sino porque tampoco es ella
la única jugadora en esto, y hay otros jugadores tal vez más peligrosos, como lo demostró
la presencia de Falcone. E incluso él está cubriendo a un pez más gordo.
Pero aún así, la interpretación
de su personaje fue maravillosa, y le deparo una vida llena de perturbadora
maldad y violencia sin sentido. Justo lo que necesita esta fórmula.

Este último es un tema
interesante porque aunque inicialmente parecen pintarlo como ejemplo perfecto
de policía corrupto, para el final empecé a pensar que tal vez en el futuro
este personaje nos pueda dar sorpresas. A su manera, al hombre le importa
Gordon, y en general lo veo más como un tipo poco-valiente atrapado en un sistema
podrido que como un hombre podrido por dentro. Hay una diferencia grande.
También debo admitir que los
detectives Allen y Montoya me parecieron mucho menos aburridos de lo que
pensaba. De hecho, me gusta el rol que juegan, demostrando que no todo está completamente
corrompido en el sistema de justicia, y seguro serán aliados interesantes de
Gordon una vez que superen la desconfianza que genera su simple presencia al
lado de Bullock.

Tal vez la escena más débil del
capítulo fue Gordon yendo a pedir ‘permiso’ al pequeño Bruce para continuar con
la cacería del asesino de sus padres. Porque darle a un niño de 12 años ese
tipo de información, sin mencionar que el niño sufrió un trauma reciente al ver
morir a sus padres, es algo totalmente creíble. Y además le pide permiso?
Entiendo que quieran afianzar la relación entre ambos personajes, pero ningún
adulto que se respete pondría un peso como ese el los hombros de un
pre-adolescente.
Sin embargo, cuento como un win
que esa escena sea la única que me arranca una verdadera crítica. Falta afinar
algunos personajes (no hablo de Barbara ni de Alfred porque simplemente todavía
no me convencen), y ver la dirección que toma el show ahora que las pautas
están establecidas, pero el potencial del show es evidente, y me mantengo
bastante optimista de lo que está por venir.
Alguien tiene algo que agregar?
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